Jorge Orendáin

Si el dolor

Lastima mirar el dolor en otro
y no sentir en uno
lo que el dolor destruye.

Mirar el dolor en uno
es no sentir en el otro,
porque lastima no mirar
aunque de mirar se duele.

Si el dolor en otro duele
destruye mirar y no sentir
que duele en uno
lo que el dolor nos mira.

Si la pausa

De tanto cantar
el mundo gira su tiempo.

Si la pausa,
es porque el canto
quiere ser mundo de otro tiempo.

Si de lluvia

Si la lluvia,
tu cuerpo es una vasija
llena de relámpagos.

Si la calma,
eres un ángel
en oración perpetua.

Si del ángel

No esperar un milagro
si miramos al ángel.
El milagro ya es el ángel
que espera ser mirado.

Si el ángel permanece
se esfuma el milagro.

Si del árbol

El árbol detendrá su decir
si el agua abandona su sueño
de ser raíz en el mundo.

Si el decir

Si no inventas una verdad
serás una palabra destinada
al olvido.

Si una verdad te inventa
serás una palabra que vestida de poesía
dirá su verdad.

Si del agua

Llena tu vaso de agua.
Si permanece vacío,
el mundo girará sediento
y no tendrá palabras
para descifrar su viaje.

Si del vino

El vino es un milagro.
Si en nuestra sangre corre,
el paraíso dicta su presencia
con su mapa líquido.

Si en el barco

Si en la bitácora de tu viaje
no aparece mi nombre
es porque tu cuerpo
hundido estaba en sus amarras.

Si el fuego

El fuego descifra la oscuridad.
Si miras bien la sombra
encontrarás un fuego que incendia
tus ojos.

Si del verbo

Si Cristo es verbo
nuestra única tarea será
adjetivar nuestros sueños.

Si la vida

Me duele el lado izquierdo de la vida.
Grito el dolor a los costados del viento.
Si alguna palabra respondiera,
el lado izquierdo de la vida
sería mi paraíso.

Si el corazón

Si pensamos,
el corazón late desconcertado.
Si sentimos,
el pensamiento inventa su corazón
y las palabras palpitan
en su sangre decir.